Tras el descubrimiento de espeleo diluviando en la sima de Geólogos (espeleodiluvi) donde más de un enganchó un resfriado , esta vez tocaba espeleo de verdad en la Sima de los Pouetons de las Agudas (-123m) bajo el macizo de conglomerado de Montserrat para estrenar el año que acaba de empezar.
Para la expedición contábamos con el equipo de exploración formado por Cris, el Ramon, el Bernat, Raimon, Paco y yo mismo (Natxo).
Tras intentar localizar al Raimon por cielo y tierra sin éxito, pensando que la noche ha confundido al ballaruques number one, decidimos salir de Pallejà y tomar dirección hacia Can Massana donde se aparca para hacer la aproximación.
Llegados a Can Massana recibimos la aparición del Raimon que estaba sin móvil pero todo motivado nos esperaba en el parking.
Al mismo parking nos ponemos a cortar las "bobinas" de cuerdas y preparar la logística de la salida ordenando el material colectivo según la topo de la cavidad y iniciamos la aproximación hacia el refugio Agujas – Vicenç Barbé (45 mi. aprox)
Una vez en el refugio hacemos los últimos recordatorios técnicos para hacer memoria de las maniobras de ascenso y descenso y nos dirigimos a la boca de la cavidad.
Esta cavidad dispone de dos bocas de entrada superior e inferior, en nuestro caso accedemos por el inferior donde la salida es un poco más expuesta con el pozo de 32m.
Superado este pozo volado, el mismo pozo continúa por un pozo de 16m vestido para una colada chulísimos.
En la base de este pozo hay que continuar haciendo una pequeña trepada con alguna estrechez y bajar un pequeño pozo de -8m. A continuación hay que hacer una trepada hasta llegar al famoso pozo de la viga de -25m (llamado así porque años atrás la instalación estaba en una viga travesera colocada sobre el pozo en forma de diaclasa)
Una vez descendido el pozo, en oposición avanzamos por la misma diaclasa menudo obstruida por bloques. A partir d’aquí, nos encontramos con los últimos tres pozos encadenados ( -11m-20m i -14m) que finalizan en el famoso lago.
Llegados a este punto Cris y yo iniciamos el ascenso mientras el resto del equipo liderado por Paco, que va abriendo vía hacen el descenso hasta la cota de -123m.
Tras las fotos de rigor sólo queda lo más duro que se subir y dado que los pozos son progresivos y el cansancio se va acumulando se hace costosa la salida.
Poco a poco vamos saliendo y finalmente sale el Bernat que se encarga de desinstalar la cavidad.
Deciros que se trata de una cavidad magnífica por sus formaciones y formas peculiares en conglomerado y que además dispone de unas instalaciones excelentes con químicos.
En resumen disfrutamos de una magnífica jornada espeleológica que esperamos repetir pronto, dado que la pequeña sección de "espeleolocos" poco a poco se va consolidando.
Este es un pequeño vídeo para que se haga una idea del magnífico día que pasamos 😉